Su broca. Nuestro módulo para chaflanado. Un ahorro de tiempo para usted.
El nuevo módulo SNAP se utiliza en brocas para orificios con un diámetro superior a 18,0 mm. A pesar de su pequeño tamaño, el módulo SNAP crea chaflanes de entre 0,5 y 1,0 mm, dependiendo de la cuchilla utilizada. Existen diversos revestimientos para estas cuchillas en función del material y estos pueden sustituirse en pocos pasos con una herramienta de montaje.
Orificio | Capacidad máxima de chaflanado | Serie de herramientas |
Diámetro superior a 18,0 mm | 0.5 – 1.0 mm | SNAP18 Module |
El diseño compacto de la herramienta destaca por sus pocas piezas de desgaste. El módulo cuenta con unas dimensiones de tan solo 16,0 × 3,5 × 5,0 mm.
El cliente debe asegurarse de que la broca que ya exista cuente con un bolsillo (deberá consultar al fabricante de la broca). El módulo se fija a la broca con solo un tornillo. Para optimizar al máximo el tiempo del proceso, también se pueden integrar dos módulos en una broca. Esto permite un avance más rápido. No se puede usar con brocas de metal macizo.
Debido a las reducidas dimensiones del módulo de chaflanado, este puede instalarse directamente detrás de la punta del taladro. Esto disminuye las distancias de desplazamiento, permite perforar y chaflanar de forma simultánea, permite una profundidad mayor en la perforación y reduce la obstrucción por virutas durante el chaflanado.
Después de una sola operación, el orificio está terminado y provisto de un chaflán en ambos bordes del orificio. Este proceso se ejecuta sin girar la pieza ni cambiar de herramienta.
La broca que ya exista se encarga de la perforación. Durante el taladrado, el chaflanado se realiza tanto en la parte delantera como en la trasera con el módulo integrado para chaflanado SNAP. La cuchilla realiza el chaflán en el avance por vuelta. En cuanto se alcanza la capacidad chaflanado definida, la cuchilla se retrae radialmente en el cuerpo de la herramienta. A la salida del orificio, la cuchilla vuelve a la posición inicial a través del bulón de control accionado por resorte para poder crear el chaflán en el lado inverso.
Cuando se alcanza la capacidad de chaflanado, la cuchilla se retrae gracias a la geometría. Por ejemplo, las piezas de fundición, con sus habituales variaciones de tolerancia, pueden procesarse de forma fiable y presentar resultados de chaflanado uniformes.
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